El dialogo regional sostenido el pasado 3 de octubre de 2022, fue convocado por UTRITOL y las alcaldías Municipales de Natagaima, Purificación y Coyaima, contó con la participación de los congresistas Martha Alfonso, Carlos Edward Osorio, Olga B., delegados de Jael Quiroga, dos delegados de congresistas del partido Comunes, representantes de las organizaciones indígenas CRIT, ACIT Y FICAT y delegados de la ADR, La ANLA, Ministerio de Agricultura y Ministerio del Interior, quienes asistieron por solicitud de la congresista Alfonso y del partido Comunes.
Luego del saludo por parte de los alcaldes presentes, se brindó una contextualización del proyecto Triángulo del Tolima, mega obra que lleva inconclusa más de tres décadas y que requiere de la terminación de la fase III, para lo que se necesita una actualización técnica para conocer el monto que se requiere para finalizar el proyecto y estipular las fuentes de financiación.
La promesa de contar con agua en estos tres municipios, se empezó a materializar en el año 2000 con la construcción de la presa Zanja Honda, la falta de avance de la obra y su culminación ha calificado el proyecto como “elefante blanco” dado que no cumple con el objetivo social y económico dado que aún no se culmina para dar vía libre a su funcionamiento.
En el debate abierto sobre la mega obra y el manejo actual, UTRITOL fue enfático en su negación a qué empresas externas sean las encargadas de manejar administrativamente el distrito, ya que se cuenta con la capacidad de los y las profesionales locales para asumir este tipo de retos.
La representante Martha Alfonso, enérgicamente planteo la necesidad de tomar las banderas de este proyecto para exigir al gobierno, cumplir con la culminación de esta obra; también fue clara en recalcar que impulsar que se retome este proyecto en la agenda pública del gobierno, no es declararles la guerra a los cultivadores de arroz, ya que ellos no son el problema porque el proyecto no ha tendido ningún tipo de control, por eso las comunidades no son culpables, simplemente hicieron uso de un ejercicio de abandono estatal sistemático durante décadas, por lo que solicitó a los delegados del Ministerio de Agricultura y la Agencia Nacional de Tierras llevarle el mensaje a la ministra de hacer un piloto de catástrofe multipropósito en el territorio, que se compren los predios para sanear administrativa y legalmente este proyecto, y que se pueda definir un recurso que permita fortalecer a la asociación de usuarios del distrito de riego y a las alcaldías municipales para que en conjunto puedan gobernar y administrar este proyecto.
También solicitó al Ministerio del Interior, el avance rápido de la consulta previa con las comunidades indígenas para que este proyecto se culmine, a la agencia de Dearrollo Rural, celeridad en los productos de la consultoría para la actualización de estudios y diseños del plan Agropecuario y que sean socializados a las comunidades en el tema de impactos y ajustes que se deben hacer, ya que el proyecto ha desestabilizado el tejido social.
Martha Alfonso extendió la invitación a la bancada parlamentaria, para realizar un debate de control político sobre este tema, ya que le parece inaudito que anualmente se inviertan 8.000 millones de pesos en el mantenimiento de estas obras y cada vez estas se estén deteriorando y generando problemas para los habitantes.
Resaltamos también las denuncias realizadas por la procuraduría ambiental y agraria en cabeza del doctor Daniel Rubio y Vladimir Forero, delegado de la contraloría departamental, pues fueron enfáticos en señalar la negligencia por parte de las entidades gubernamentales, que han recibido infinidad de denuncias sobre este proyecto y a la fecha no han actuado, denunciando la falta de interés por parte de CORTOLIMA, quien no participó de este espacio aun cuando este proyecto es de su competencia.