De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) casi toda la población mundial respira un aire que supera los límites de calidad del aire que pone en peligro nuestra salud, según los resultados de la actualización 2022 de su base de datos sobre la calidad del aire.
Son diversas las enfermedades que se derivan de la mala calidad del aire y existen cuantiosas causas que fomenta este problema, una de ellas es el uso desaforado de combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas natural) ya que su combustión genera una gran cantidad de gases y esto hace que sea una de las principales fuentes de contaminación atmosférica.
En el marco del día mundial de la salud este año, se celebra el tema nuestro planeta, nuestra salud, la actualización de 2022 de la base de datos de calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud presenta, por primera vez, mediciones en la tierra de las concentraciones medias anuales de dióxido de nitrógeno, un contaminante urbano común y precursor de partículas y ozono, incluyendo las mediciones de material particulado, contaminantes donde su origen viene de las actividades humanas relacionadas con la quema de combustibles fósiles.
El dióxido de nitrógeno (NO2) se asocia a enfermedades respiratorias, sobre todo al asma, lo que provoca síntomas respiratorios (como tos, sibilancias o dificultad para respirar). Las partículas, especialmente las PM 2,5 son capaces de penetrar profundamente en los pulmones y entrar en el torrente sanguíneo, causando impactos cardiovasculares, cerebrovasculares (ictus) y respiratorios.
Según el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS “Las preocupaciones energéticas actuales resaltan la importancia de acelerar la transición hacia sistemas energéticos más limpios y saludables”.
Estos resultados han llevado a la Organización Mundial de la Salud a subrayar la importancia de frenar el uso de combustibles fósiles y tomar otras medidas tangibles para reducir los niveles de contaminación atmosférica.
La OMS estima que más de 13 millones de muertes al año en el mundo se deben a causas ambientales evitables.