Por: Begoña Marugán Pintos
La fecha elegida no se debe a un hecho aislado. Este día se encuentra en todas las luchas de las mujeres que no se conformaron con su triste destino de género sin derechos.
El 8 de marzo fue instaurado en 1952 como Día Internacional de la Mujer por la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU). Sin embargo, existe incertidumbre en torno a su origen. El origen de esta fecha se suele explicar a partir de un hecho aislado, cuando se debería explicar que la lucha de las mujeres ha sido una constante y que las mujeres han tenido que liderar batallas en todos los ámbitos: sociales, políticos y, sobre todo, el laboral.
Se ha extendido la idea de que el origen de esta celebración está en el incendio acontecido en una fábrica textil de Nueva York cuando las mujeres protestaban contra unas penosas condiciones de trabajo. Incluso algunos artículos, como uno publicado por Carmen Cardoso Parra en El Mundo, incluyen otras peculiaridades que darían respuesta no sólo a por qué se habla del Día de la Mujer Trabajadora, sino a ¿por qué el morado es el color feminista?:
“El 8 de marzo de 1908, un grupo de mujeres se reunieron en la fábrica textil Cotton de Nueva York para declararse en huelga. El dueño las encerró con llave y prendió fuego al edificio: murieron 129 mujeres. Las telas que fabricaban eran de color violeta, por eso desde entonces este color se convirtió en un símbolo de la lucha de la mujer por sus derechos”.
Sin embargo, el 8 de marzo de 1908 no hubo ningún incendio en ninguna fábrica textil de Nueva York y no hubo huelga alguna, porque era domingo y por tanto día de descanso. Sí hubo un incendio en una fábrica textil, la Triangle Shirtwaist Company, donde murieron muchas mujeres, la mayoría chicas inmigrantes entre 17 y 24 años, pero no fue el 8 de marzo de 1908 sino el 25 de marzo de 1911.
Entonces, ¿no existe ninguna relación de la fecha con la lucha de las mujeres por mejorar sus condiciones de trabajo? Sí. Que no existiera una relación con un acontecimiento concreto no implica que debamos rechazar la idea del origen obrerista de esta celebración y pensemos en la falta de relación del 8 de marzo con la lucha de las mujeres por conseguir mejoras laborales, pues las manifestaciones y huelgas de mujeres fueron un hecho constante. Por ejemplo: en el año 1853, en los distritos del algodón de Manchester, unas 21.000 personas de los talleres de Preston, de las cuales el 55,8% eran niñas menores de 13 años, protagonizaron huelgas y todo tipo de disturbios; en 1857 una marcha pionera de obreras textiles recorrió los suburbios ricos de la ciudad de Nueva York para protestar por las miserables condiciones de trabajo. En España también hubo huelgas exclusivamente femeninas. En el periodo 1905-1921 la provincia más conflictiva fue Barcelona, con 185 huelgas. A la que siguieron las localidades de Valencia (con 64 huelgas), Zaragoza (con 55) y Madrid (con 48).
En 1908, bajo el eslogan “Pan y Rosas”, se manifestaron 15.000 por las calles de Nueva York para exigir un recorte del horario laboral, mejores salarios, el derecho al voto y el fin del trabajo infantil. Por tanto, el origen del 8 de marzo está en las luchas de las mujeres empleadas, pero siempre se necesitan personas que concreten estas peleas y eventos que lo permitan.
El hecho fundacional lo encontramos en la I Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, celebrada en Sttutgart en 1907. La líder socialista indiscutible de ese momento fue Clara Zetkin. En esa conferencia, Zetkin planteó una resolución en la cual instaba a todos los partidos socialistas a realizar una campaña a favor del voto para la mujer. Unos años más tarde, en 1910 en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, Zetkin propuso la celebración de un Día Internacional de la Mujer.
De este modo recogía la idea de las mujeres americanas del Partido Socialista de celebrar el Woman’s Day el último domingo del mes de febrero. Fechas en las que se vino celebrando desde 1911 a 1914 en distintos países.
La primera vez que se conmemoró el Día Internacional de la Mujer fue en 1911 y más de un millón de mujeres participaron públicamente. Pero ahí las demandas eran variadas. Se pedía el derecho al voto y a ocupar cargos públicos, a la enseñanza, al trabajo y al fin de la discriminación laboral.
La elección del 8 como fecha definitiva de celebración de este día proviene de Rusia y se debe a una sublevación de mujeres contra la guerra, que fue el prolegómeno de la Revolución Bolchevique. El 8 de marzo de 1917 las mujeres rusas se amotinaron ante la falta de alimentos, dando inicio al proceso revolucionario que acabaría en el mes de octubre de ese mismo año con la caída del régimen zarista. Se ha borrado el origen comunista de este hecho, pero diferentes textos apuntan a esta teoría.
Por tanto, como se puede observar, no fue un hecho aislado el origen del 8 de marzo, sino que éste se encuentra en todas las luchas de las mujeres que no se conformaron con su triste destino de género sin derechos.
Referencia: https://www.lamarea.com/2016/03/08/83013/