La revocatoria de la alcaldesa de Susa, Cundinamarca, Ximena Ballesteros Castillo, finalmente se logró. En su mayoría, las personas que acudieron a las urnas votaron para que ella saliera del cargo. De acuerdo con la información suministrada por la Registraduría, un total de 1.672 votantes acudieron a las urnas, de ellos, el 97,13% de los sufragantes votaron por el «Sí»; es decir, a favor de la revocatoria. Los 35 votos restantes fueron marcados por el “No”.
De los 5.370 electores que estaban habilitados para sufragar, el 31,14% de los habitantes de ese municipio acudieron a las mesas para revocar a la alcaldesa, quien fue elegida con aval del Centro Democrático.
De esta manera, Ximena Ballesteros se convierte en el segundo alcalde del país en ser revocado de su mandato desde que existe este mecanismo de participación. El primer caso se dio en Boyacá, en el municipio de Tasco, en julio del 2018 la ciudadanía acudió a las urnas para retirar del cargo al entonces mandatario Nelson Javier García Castellanos.
¿Qué procede?
Una vez se realice el escrutinio y se confirme que la votación pasó el umbral y que el sí por la revocatoria ganó, pasa a manos del gobernador. El mandatario deberá desvincular a la actual alcaldesa, nombrar a una persona en el cargo y convocar a unas nuevas elecciones. Por el momento, Ballesteros no se ha pronunciado sobre su revocatoria, tampoco lo ha hecho el Centro Democrático, su partido político.
Eduardo Rueda, vocero de la revocatoria, dijo que la alcaldesa no cumplió su plan de Gobierno, y eso generó molestia en la comunidad. «Tuvo muchos problemas administrativos y había mucha insatisfacción de la gente», dijo. «Fue algo masivo, fue el resultado de algo que la gente quería y la prueba es que la alcaldesa solo tuvo un poco más de 30 votos» Por último, agregó, que la gente está muy contenta, sobre todo porque fue un proceso de la gente.