Pueblos originarios de la Sierra Nevada defienden jurídicamente ‘El corazón del mundo’

Actualidad Ambiente

El corazón del mundo está en riesgo, y por eso, los Arhuacos, Wiwas, Kogis y Kankuamos, pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta, y organizaciones nacionales e internacionales, se unieron para defender el territorio sagrado de la Línea Negra, de una demanda impulsada por gremios económicos.

“Esto de que la Sierra Nevada de Santa Marta sea considerada el corazón del mundo no es una cosa caprichosa, es una concepción arraigada a nuestra cosmovisión, es un territorio sagrado necesario para mantener el equilibrio de la vida en el mundo, por eso convocamos a los ciudadanos, organizaciones sociales y fuerzas políticas a defender y proteger el corazón del mundo a través una movilización social, popular, pero también cultural y espiritual, tenemos que volver al origen, proteger los territorios y reencontrarnos con la madre tierra, para proteger nuestra casa común”, explicó Luis Fernando Arias, consejero mayor de la ONIC.

Es importante aclarar que, la demanda promovida por sectores empresariales como Camacol y la ANDI busca la nulidad del Decreto 1500 y se encuentra en la Sección Primera del Consejo de Estado. A través de mentiras y falsas interpretaciones sobre el alcance del Decreto 1500, buscan desnaturalizarlo y desconocer la lucha que los cuatro pueblos de la SNSM han adelantado durante más de 60 años para que la institucionalidad reconociera la importancia ancestral, cultural y ambiental de su territorio.

“El Decreto 1500 no pone en riesgo el desarrollo y el progreso del país, todo lo contrario, en la medida en que podamos conservar este territorio sagrado vamos a garantizar la vida y la superviviencia de la humanidad”, manifestó el consejero mayor.

Para eso, radicaron una serie de acciones legales ante el Consejo de Estado para proteger y respaldar la legalidad del Decreto 1500 de 2018 que reconoce la Línea Negra y que está bajo ataque por una demanda impulsada por gremios económicos.

“Hemos decidido presentar un recurso dentro del proceso de nulidad para defender el decreto. Este Decreto se formó a partir de nuestro Documento Madre, gracias a un verdadero proceso de consulta previa, pudimos establecer un diálogo con el Estado para que nuestra cosmovisión sobre la Sierra Nevada de Santa Marta y la Línea Negra fuera reconocida por la institucionalidad, expresaron en un comunicado del Consejo Territorial de Cabildos de la Sierra Nevada de Santa Martha.

Y agregaron: “En compañía del Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICAHN) , el Ministerio de Cultura, el Ministerio del Interior y los miembros de los cuatro pueblos pudimos establecer una delimitación justa del espacio de la Línea Negra y sus 348 sitios sagrados”.

El Decreto 1500/18 de Linea Negra, expedido en la presidencia de Juan Manuel Santos, no busca más que la protección de ese territorio ancestral y los espacios sagrados, asi como garantizar la integralidad del bienestar ecologico de la Sierra y otros ecosistemas del mundo conectados a ella, para perservar la vida y contribuir a contrarrestar el acelarado cambio climático. Sin embargo, a la fecha no se ha visto voluntad institucional para su implementación por parte del gobierno de Ivan Duque.

“Cada día que pasa, sin la implementación del decreto el riesgo de su extinción es mayor. Dentro de esta lucha jurídica estamos juntos los cuatro pueblos y nos acompañan varias organizaciones nacionales e internacionales de derechos humanos y de defensa por el ambiente, esta defensa es de todos, debemos defender el corazón del mundo”, puntualizó Jaime Luis Arias, Secretario técnico del Consejo Territorial de Cabildos.

Agregando que, este reconocimiento del territorio sagrado es un avance para el desarrollo del derecho al territorio y la protección de los espacios territoriales megadiversos que abundan en Colombia.

Finalmente, Gelver Zapata, coordinador de Territorio, Confederación Indígena Tayrona, dijo: “Hoy, el corazón del mundo está llegando a un punto de no retorno, y si se acaba el territorio nos extinguimos como pueblos”.

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