Si bien actualmente el fenómeno de la crisis climática es más latente que nunca, y pese a la necesidad de preservar, conservar y potenciar el cuidado de los bienes comunes, lamentablemente en Colombia las acciones de deforestación aumentaron en un 1.5% en el año 2021, siendo el registro de tala de hectáreas de 174.103.
Mucho se ha abarcado sobre la importancia y la necesidad de garantizar el cuidado de las especies forestales y bienes comunes con los que contamos como sociedad; particularmente en Colombia, un territorio que tiene la fortuna de tener un relevante porcentaje de biodiversidad, con apenas una pequeña proporción de la plataforma planetaria.
Lamentablemente, el Ministerio de Ambiente y el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) presenta en su informe datos desalentadores en materia de deforestación en el país para el año inmediatamente anterior. Como ya se mencionó, durante el año pasado se talaron 174.103 hectáreas de bosque, principalmente en los departamentos de Meta, Caquetá, Guaviare, Putumayo, Norte de Santander y Antioquia (donde se registró el 77% de la deforestación), siendo los cuatro primeros parte de la región Amazónica, donde se ha focalizado históricamente esta problemática ambiental; además, el reporte también indica que esta acción tuvo un incremento del 13% en el Parque Nacional Chiribiquete.
Los departamentos que comprenden la Amazonia noroccidental sufren el llamado “arco de la deforestación”, siendo un área donde la problemática tiene cifras muy altas por la gran expansión de actividades agropecuarias y la presencia de intereses de extracción minera.
Aún así, las entidades también dieron a conocer que la deforestación se redujo en otros Parques Nacionales Naturales, como el Tinigua (-6 %), Sierra de La Macarena (-11 %), La Paya (-17 %), Paramillo (-28 %), Cordillera de los Picachos (-30 %) y la Reserva Nacional Natural Nukak (-33 %). Estas áreas protegidas nacionales, durante los últimos años, han concentrado la mayor proporción de este fenómeno, convirtiéndose en un dato alentador y que impulsa el seguir promoviendo acciones públicas de cuidado de estos ecosistemas.
En las cifras que fueron publicadas en el año 2020, cuando se talaron 171.685 hectáreas, se presentaron tendencias parecidas. Por ejemplo, también se señaló que cinco departamentos concentraron el 70 % de la deforestación: Caquetá, Guaviare, Putumayo, Antioquia y Meta. Norte de Santander fue el único que se sumó a los lugares en donde más se focalizó la problemática en 2021.
El Ministro de Ambiente, Carlos Eduardo Correa, expresó que las principales causas de la deforestación son la praderización orientada al acaparamiento de tierras, la implementación de malas prácticas de ganadería extensiva, los cultivos de uso ilícito, la ampliación no planificada de infraestructura de transporte, la extracción ilícita de minerales, la tala ilegal y la ampliación de la frontera agrícola en áreas no permitidas.
El llamado urgente se dicta a atender de manera rigurosa y con convicción esta problemática que concierne a todos y todas, disponer de todo el aparato institucional, humano y los recursos necesarios para contener la deforestación en el país, además de promover y fortalecer los programas orientados a la reforestación en los distintos territorios y ecosistemas estratégicos que tristemente han sufrido históricamente de este flagelo; la educación ambiental, y sobre todo las relaciones económicas del país, deben estar enfocadas a la preservación y recuperación de los bienes comunes, garantizando así las condiciones necesarias para presente y futuras generaciones.